Slayer "South of Heaven"
1. South Of Heaven
2. Silent Scream
3. Live Undead
4. Behind The Crooked Cross
5. Mandatory Suicide
6. Ghosts Of War
7. Read Between The Lies
8. Cleanse The Soul
9. Dissident Aggressor
10. Spill The Blood
No quiero empezar este artículo con una controversia. Tal vez no pueda decir que esta sea la mejor banda de metal de la historia (aunque sin duda sea una de las mejores); pero sí puedo afirmar que este es el mejor dico de metal de la historia.
La verdad que tampoco. No sé si es la mejor banda y el mejor disco de la historia del metal. Pero si no es así, pega en el palo. En otras palabras, este es sin lugar a dudas uno de los mejores discos de Metal y te va a romper la cabeza en pedazitos.
Pero este disco está hoy aquí, justamente por no ser otro disco de Metal, sino por ser una jugada muy arriesgada de una banda que siempre nos ha brindado un material muy consistente. Slayer, a diferencia de otras super bandas del Metal, como pudo ser Metallica, nunca bajó el volúmen. Siempre tocó al máximo de su capacidad en términos de ferocidad. A diferencia de Metallica e incluso Megadeth, jamás escucharán una balada de Slayer. Pero aquí hay un elemento interesante y este disco es un punto de inflexión en este aspecto. A pesar de que Slayer simepre fue una banda que toco duro, fuerte y rápido, en este disco de 1988, hay un pequeño giro en lo que respecta al tiempo.
En su disco anterior Hell Awaits (El infierno espera) de 1985 Slayer impuso una nueva marca de velocidad para el género. Después de este disco ya se avecinaba lo que ya es conocido para nosotros, riffs y bases de batería a 200 bpm (bits por minuto, unidad de medida de rítmo). En otras palabras, Slayer abrió la puerta del infierno para que miles de bandas de Metal salieran a tocar a velocidades desmedidas. Tal vez podamos encontrar algunas pequeñas excepciones, como Suicidal Tendencies en su disco homólogo (1983) en el que encontramos rítmos descomunalmente veloces inclusos para los estándares de hoy, pero eso es material para otro artículo.
Volviendo a South of Heven, después de demostrar cuan rápido y crudo podía ser el metal, Slayer se detuvo en este disco a experimentar con rítmos a mitad de tiempo.
Por decirlo de alguna manera, este es el disco de Metal más lento que podamos encontrar. Slayer nos demuestra en este disco que no necesita tocar rápido para ser pesado y feroz.
La temática, recurrente, satanismo, muerte entre otros, también presenta un matiz diferente -dentro del mismo campo semántico- al del resto de la discografía de Slayer.
En este caso el sadismo se encuentra a medio camino de la depresión. Esto se puede ver en la aluciones al suicido y la muerte obligada en la línea del frente. Nuevamente, como profetas se anticipaban a lo que iba a venir, más guerra!
Como ya dijimos, nunca encontraremos una balada de Slayer, pero el tema que da cierre a esta sublime obra de arte -Spill the blood- (Derrama la sangre) descubriron o desarrollaron un subgénero que no podría decir que es balada, pero sí canción "lenta" con un segundo movimiento más acelerado.
El rítmo es un elemento clave en este disco. Mucha gente critica el Metal por ser un género sin ritmo. Pues este disco es la major manera de desmentir este mito. Dave Lombardo quien ejecuta magistralmente la batería en este disco posee más groove del que pude apreciar en un sinnumero de bandas de música supuestamente rítmica. Es muy justo destacar el rítmo increible que imprime Lombardo en este disco.
Pasando a apreciaciones personales más íntimas sobre mi relación con este disco, recuerdo la primera vez que lo escuché. La primer canción de Slayer que escuché en mi vida fue Behind The Crooked Cross, esto es la primer canción del lado B del casette. Bue! en esa época todavía existían las cintas magnéticas que llamamos casettes.
Como describirlo!
Una guitarra poderosa tocando dos notas, una tónica y una quinta de Mi (E). Eso de por sí tenía el poder de volarme la cabeza. Unos pocos compases más tarde Dave Haneman se suma a Kerry King y ahí nomás mi vida cambió como cuando leí por primera vez a Marx o Freud. Mi concepción del mundo no volvería a ser la misma. De alguna manera puedo comparar estas experiencias a peder la virginidad.
Para ir cerrando, hay quienes dicen que si pasamos un disco inversamente podemos escuchar mensajes satánicos. En este caso no hay que hacer tal operación. Simplemente corriendo este disco de manera normal encontraremos mensajes explícitamente satánicos.
Pero el mensaje escondido está en la metáfora sur del paraiso. Entiendo que el Norte, es decir Estados Unidos, Europa y todo lo que hay en el emisferio norte no es el paraiso, pero sin duda, aquí, en el sur, estamos al sur del paraíso.
Los dejo con un fragmento de un gran poema:
Chaos rampant, / Caos Rampante
An age of distrust. / Una era de desconfianza
Confrontations. / Confrontación
Impulsive habitat. / habitat impulsivo
On and on, south of heaven / Así y así en el sur de paraiso (ó cielo)
Slayer “South of Heaven”
La verdad que tampoco. No sé si es la mejor banda y el mejor disco de la historia del metal. Pero si no es así, pega en el palo. En otras palabras, este es sin lugar a dudas uno de los mejores discos de Metal y te va a romper la cabeza en pedazitos.
Pero este disco está hoy aquí, justamente por no ser otro disco de Metal, sino por ser una jugada muy arriesgada de una banda que siempre nos ha brindado un material muy consistente. Slayer, a diferencia de otras super bandas del Metal, como pudo ser Metallica, nunca bajó el volúmen. Siempre tocó al máximo de su capacidad en términos de ferocidad. A diferencia de Metallica e incluso Megadeth, jamás escucharán una balada de Slayer. Pero aquí hay un elemento interesante y este disco es un punto de inflexión en este aspecto. A pesar de que Slayer simepre fue una banda que toco duro, fuerte y rápido, en este disco de 1988, hay un pequeño giro en lo que respecta al tiempo.
En su disco anterior Hell Awaits (El infierno espera) de 1985 Slayer impuso una nueva marca de velocidad para el género. Después de este disco ya se avecinaba lo que ya es conocido para nosotros, riffs y bases de batería a 200 bpm (bits por minuto, unidad de medida de rítmo). En otras palabras, Slayer abrió la puerta del infierno para que miles de bandas de Metal salieran a tocar a velocidades desmedidas. Tal vez podamos encontrar algunas pequeñas excepciones, como Suicidal Tendencies en su disco homólogo (1983) en el que encontramos rítmos descomunalmente veloces inclusos para los estándares de hoy, pero eso es material para otro artículo.
Volviendo a South of Heven, después de demostrar cuan rápido y crudo podía ser el metal, Slayer se detuvo en este disco a experimentar con rítmos a mitad de tiempo.
Por decirlo de alguna manera, este es el disco de Metal más lento que podamos encontrar. Slayer nos demuestra en este disco que no necesita tocar rápido para ser pesado y feroz.
La temática, recurrente, satanismo, muerte entre otros, también presenta un matiz diferente -dentro del mismo campo semántico- al del resto de la discografía de Slayer.
En este caso el sadismo se encuentra a medio camino de la depresión. Esto se puede ver en la aluciones al suicido y la muerte obligada en la línea del frente. Nuevamente, como profetas se anticipaban a lo que iba a venir, más guerra!
Como ya dijimos, nunca encontraremos una balada de Slayer, pero el tema que da cierre a esta sublime obra de arte -Spill the blood- (Derrama la sangre) descubriron o desarrollaron un subgénero que no podría decir que es balada, pero sí canción "lenta" con un segundo movimiento más acelerado.
El rítmo es un elemento clave en este disco. Mucha gente critica el Metal por ser un género sin ritmo. Pues este disco es la major manera de desmentir este mito. Dave Lombardo quien ejecuta magistralmente la batería en este disco posee más groove del que pude apreciar en un sinnumero de bandas de música supuestamente rítmica. Es muy justo destacar el rítmo increible que imprime Lombardo en este disco.
Pasando a apreciaciones personales más íntimas sobre mi relación con este disco, recuerdo la primera vez que lo escuché. La primer canción de Slayer que escuché en mi vida fue Behind The Crooked Cross, esto es la primer canción del lado B del casette. Bue! en esa época todavía existían las cintas magnéticas que llamamos casettes.
Como describirlo!
Una guitarra poderosa tocando dos notas, una tónica y una quinta de Mi (E). Eso de por sí tenía el poder de volarme la cabeza. Unos pocos compases más tarde Dave Haneman se suma a Kerry King y ahí nomás mi vida cambió como cuando leí por primera vez a Marx o Freud. Mi concepción del mundo no volvería a ser la misma. De alguna manera puedo comparar estas experiencias a peder la virginidad.
Para ir cerrando, hay quienes dicen que si pasamos un disco inversamente podemos escuchar mensajes satánicos. En este caso no hay que hacer tal operación. Simplemente corriendo este disco de manera normal encontraremos mensajes explícitamente satánicos.
Pero el mensaje escondido está en la metáfora sur del paraiso. Entiendo que el Norte, es decir Estados Unidos, Europa y todo lo que hay en el emisferio norte no es el paraiso, pero sin duda, aquí, en el sur, estamos al sur del paraíso.
Los dejo con un fragmento de un gran poema:
Chaos rampant, / Caos Rampante
An age of distrust. / Una era de desconfianza
Confrontations. / Confrontación
Impulsive habitat. / habitat impulsivo
On and on, south of heaven / Así y así en el sur de paraiso (ó cielo)
Slayer “South of Heaven”
Comentarios
enhorabuena por el blog y por las reseñas de discos que suelo leer con asiduidad. te queria pedir permiso para poder publicarlas en portada de masmusika.net que es un proyecto independiente de critica musical. si quieres escribeme a webmaster@muchocine.net
gracias y enhorabuena por el blog
Es un discazo pero la tendencia general (yo estoy de acuerdo también) es calificar a Reign in Blood como mejor disco de Slayer, siendo un hito en el género. 1986 se considera como el año más fuerte del metal de toda la historia, en gran parte gracias a este disco (y a Master of Puppets cómo no).
Saludos!